El maestro Héctor Laborde nos recibe en su casa-taller en Sayago. Entre otras obras, nos muestra las que formarán parte de "Obras en construcción", exposición en homenaje a su maestro Miguel Ángel Pareja, que tendrá lugar en el Centro Cultural Pareja de Las Piedras.
En un espacio "de pasaje" en su casa, con obras en proceso, que va modificando, destaca precisamente el valor de retomar el trabajo en cada obra, seguir revisitándola con el paso del tiempo; en definitiva, reconocer el valor de la duda. Esto responde a enseñanzas de su maestro Pareja; con él aprendió que la pintura se trabaja. Es necesario el talento, pero no alcanza; el trabajo es lo que la consolida; por eso acostumbra retomar las obras, y eso las mejora. Reconoce que es un camino infinito, que la obra de un artista siempre será incompleta; pero eso, dice, no es lo que importa, sino que lo que haga sea auténtico.
Durante la entrevista, con generosidad, Laborde sigue profundizando en esos y otros conceptos teóricos que fundamentan su obra.
Comparte sus reflexiones acerca de forma y color: "Siempre que hay un problema, es de dibujo, no de color". Recuerda que Pareja decía que si un dibujo está bien hecho, se pinta solo. Y, precisamente, refiriéndose al dibujo, dice que cuando dibuja no piensa en la forma sino en el contenido, y a partir de eso "el dibujo aparece". Nos precisa que se refiere al contenido espiritual, ya que el arte es una transferencia espiritual (laica, aclara).
Nos habla del Taller KO, que fundó después de que la Escuela Nacional de Bellas Artes fue clausurada por la dictadura en 1973.
Finalmente, nos acompaña en la visita a su muestra homenaje en el Centro Cultural Pareja de Las Piedras. Durante el recorrido describe diferentes técnicas que utiliza (impresos digitales, a veces intervenidos con pintura acrílica, también xilografías, collages). Se detiene en su serie "Desaparecidos", en memoria de los detenidos desaparecidos durante la última dictadura.