Radicada desde hace varios años en Barcelona Virginia Patrone mantiene su taller en Montevideo, a donde regresa cada vez que le es posible y donde ofrece clases de pintura. Frente a una pequeña tela donde ha comenzado un retrato, dibuja y pinta mientras conversa y reflexiona sobre diversos temas. Prepara una muestra individual en el Museo Gurvich, esta obra que pinta en cámara se exhibe allí, pocos días después

Pincho Casanova cree que ella debería llamarse Divina Kohen; su calidad humana y artística la elevan a un plano superior. Linda nos recibe en su casa de Montevideo, donde tiene su taller, donde pinta diariamente; activa, profunda, cálida y entusiasta, reflexiona sobre los temas que aborda su pintura: el hombre, la soledad, la vida familiar, el exilio, el paisaje